1. PROBIÓTICOS.

Los alimentos probióticos son microorganismos vivos y bacterias que trabajan con tu flora intestinal ayudando al buen funcionamiento del aparato digestivo e inmune.

2. REFUERZAN EL SISTEMA INMUNE.

Los probióticos en el Kéfir ayudan a mantener un intestino sano, donde se encuentran 70-80% de las células que componen el sistema inmunológico.

3. PESO SALUDABLE.

El Kéfir es alto en proteínas, por lo que aumenta la saciedad y reduce los antojos durante el día.

4. DIGESTIÓN.

Las bacterias vivas del Kéfir favorecen la digestión evitando el estreñimiento.

5. PIEL SUAVE.

El Kéfir también contiene ácido alfa hidroxi (AHA), una forma de ácido láctico, que actúa como un exfoliante de la piel y equilibra los niveles de PH, lo que ayuda a reducir las arrugas y deja la piel suave.

6. DIGESTIÓN DE LA LACTOSA.

En el proceso de fermentación para obtener el Kéfir desaparece gran parte de la lactosa. Coco Kéfir por su origen natural no contiene lactosa.

7. SISTEMA NERVIOSO.

Kéfir contiene triptófano. El aminoácido que ayuda a elevar los niveles de serotonina, regula el sistema nervioso, mejora la atención y concentración; ayuda en los tratamientos de depresión y trastornos del sueño.

8. FORTALECE HUESOS.

Kéfir beneficia la densidad ósea y puede reducir el riesgo de osteoporosis.

9. FUENTE DE PROTEÍNA.

Una taza de Kéfir contiene aproximadamente 10 gramos de proteína, incluyendo los ocho aminoácidos esenciales.